De entre las diferentes técnicas de relajación, subrayamos especialmente algunas de ellas, como, el entrenamiento autógeno de Schultz, la relajación progresiva de Jacobson, la relajación tónico – emocional de Ajuriaguerra, la relajación psicosomática de Madame Soubirán, la eutonía de Gerda Alexander y la relajación terapéutica en el niño de Bergés. Todas ellas se caracterizan por la evidencia científica de su metodología, y por estar firmemente ancladas en el cuerpo como una unidad, según los principios de la psicomotricidad.
Destacamos especialmente el método de relajación que es empleado por el equipo terapéutico de Residencia Berzosa, por su interés terapéutico con niños con distintos tipos de dificultades de adaptación y desarrollo, y por la experiencia contrastada y sistemática en diversos entornos clínicos: